¿Qué hay que tener en cuenta para el uso y la dosificación de la curcumina?
¿Qué se recomienda para que la curcumina sea mejor absorbida?
¿Cuál es la dosis recomendada para cada clase de molestia?
¿De qué forma puedo administrarme la cúrcuma y la curcumina?
¿Cómo consigo los mejores efectos?
¡Siga leyendo y averigüe qué debe tener en cuenta!
En la medicina ayurveda de la India ya se reconocía la capacidad de curación de la planta de cúrcuma. Al contrario que los medicamentos elaborados de forma sintética, la cúrcuma no solo ofrece una buena tolerancia, sino que apenas tiene efectos secundarios cuando su uso y dosificación son los indicados. Únicamente las mujeres embarazadas y lactantes, las personas hemofílicas y con cálculos biliares deben consultar con su médico antes de comenzar a tomarla.
Los efectos de la curcumina sobre enfermedades como el cáncer, el Alzheimer, la artrosis, la diabetes, las infecciones y muchas otras han sido investigados en numerosos estudios. La curcumina ha sido oficialmente confirmada por la CE como un medicamento herbario efectivo para los trastornos digestivos. Resulta impresionante la enorme versatilidad de esta zingiberácea, literalmente llamada “raíz amarilla” en alemán. Aquí encontrará un resumen de sus ámbitos de aplicación. Para poder sacar el máximo provecho de la raíz amarilla, es imprescindible que preste atención a las indicaciones de uso y de dosificación.
Uso eficaz de la cúrcuma
La curcumina que contiene la cúrcuma es no soluble en agua y, por eso, difícilmente absorbida por el cuerpo fuera de las comidas. Además, una vez que es reabsorbida, permanece pocas horas en el sistema circulatorio. Se dice que presenta una mala biodisponibilidad. Para poder mejorarla y que no pierda casi por completo esta estupenda sustancia activa, deben tenerse en consideración las siguientes cuestiones.
Administración acompañada siempre de pimienta negra
La piperina que contiene la pimienta negra facilita que la curcumina sea tolerada por el cuerpo hasta veinte veces más (según un estudio). Y sin necesidad de añadir mucha cantidad de pimienta. La pimienta negra contiene 5-9 % de piperina. Una combinación de 1 mg de piperina cada 100 mg de curcumina ya produce ese efecto. Por tanto, suele ser suficiente con una pizca de pimienta. Algunas personas son sensibles a la pimienta y, en consecuencia, pueden serlo también a un extracto de pimienta o piperina. Las intolerancias a la pimienta o a la piperina pueden provocar ardores de estómago y otras irritaciones estomacales. Es por eso que, en casos conocidos de irritabilidad estomacal, deben tomarse cautelarmente los preparados de cúrcuma o curcumina con piperina. También el jengibre y otras raíces parece que ayudan a incrementar la biodisponibilidad de la sustancia activa. Este estudio lo confima: Bioavailability enhancers of herbal origin: An overview.
Administración acompañada siempre de grasa
Dado que la cúrcuma y la curcumina no son solubles en agua, como muchas otras raíces y sustancias, pero sí en grasa, es imprescindible que sean ingeridas siempre acompañadas de grasa.
La combinación de la raíz india con la pimienta y el aceite de oliva o el aceite de linaza, o cualquier otra grasa, resulta muy sabrosa y mejora mucho la biodisponibilidad de la curcumina. Por esta razón, lo recomendable es tomar la cúrcuma en polvo en cápsulas, con las comidas, o a modo de condimento añadido a los alimentos. Antes de tomar la raíz, lo mejor es mezclarla con un poco de aceite y tragarla después o, si no, añadirla a las comidas. Si se usan los tubérculos frescos, los aceites naturales que contienen favorecen la reabsorción. Con las comidas dulces, el aceite de coco resulta perfecto para combinar con la curcumina.
Un consejo extra: en caliente.
¿Por qué en los países asiáticos casi todos los aceites se calientan antes de añadirles otros ingredientes? Una razón importante puede ser que sus aromas se intensifiquen al hacerlo. Pero también podría ser porque muchas sustancias activas de las raíces se digieren mejor al calentarse en grasa y, en consecuencia, son mejor toleradas por el cuerpo. Esto también podría valer concretamente para la curcumina que contiene la cúrcuma, aunque no existen estudios específicos que lo avalen.
Así que, la próxima vez que quiera cocinar con esta estupenda raíz, caliéntela antes en aceite. Recomendamos que elija, preferentemente, las grasas saturadas y resistentes al calor, como el aceite de coco o el de colza. Al calentar la cúrcuma, también se reduce el sabor ligeramente amargo que tiene.
Lo único que tiene que hacer es abrir las cápsulas de cúrcuma con curcumina añadida y calentar el polvo en un cazo junto con el aceite de coco. Si le añade un par de huevos, el resultado es un auténtico superalimento para desayunar.
Dosificación de la cúrcuma y la curcumina
Lo primero que debe hacer es decidir de qué forma desea tomar la sustancia activa de la raíz:
Raíz de cúrcuma fresca: la raíz amarilla fresca y troceada, con todos sus aceites esenciales, resulta perfecta para adobar, para cocinar o para ensaladas.
Polvo de cúrcuma seca: es el uso más frecuente, en el cual se pierden algunas sustancias activas, aunque se conservan la mayoría.
Extracto de cúrcuma: la curcumina es extraída con el fin de conseguir dosis más altas. Las demás sustancias activas de la raíz se pierden, pero se consiguen dosis de curcumina que también han sido utilizadas en numerosos estudios.
Se desaconseja el uso de las mezclas de raíces, pues contienen muy poca cúrcuma. No hay indicaciones establecidas sobre cómo dosificar la cúrcuma. Las recomendaciones que hacemos aquí, que deben servir de referencia, las hemos recopilado de distintas fuentes. Es muy importante distinguir entre el uso preventivo, duradero, y el uso limitado en el tiempo de una dosis elevada, para casos de enfermedades o síntomas concretos.
La dosis diaria recomendada por la University of Maryland Medical Center para adultos es:
- Raíz de cúrcuma fresca, troceada: 1,5 a 3 gramos al día
- Raíz seca, en polvo (cúrcuma): 1 a 3 gramos al día
- Extracto de cúrcuma (curcumina): 1,2 a 1,8 gramos al día
¡En episodios agudos de enfermedades, se pueden incrementar las dosis!
¡Atención: reparta las tomas a lo largo del día!
Como la curcumina es eliminada del cuerpo muy rápidamente, se recomienda repartir las tomas a lo largo del día. Lo mejor es dividir la dosis diaria en tres y tomarla tres veces al día, con las comidas.
Las cápsulas de cúrcuma facilitan su administración
Como puede resultar difícil tomar una o dos cucharadas de té de cúrcuma a diario y como el contenido de curcumina no es particularmente elevado, se ofrece el producto en cápsulas. Contiene, además de la cúrcuma natural en polvo, dosis elevadas de curcumina y piperina. Aquí encontrará consejos y una lista de control que le ayudará en la compra del producto de cúrcuma más adecuado.
Al elegir los productos en cápsula, debe tener en cuenta si el fabricante puede certificar efectivamente la calidad y la pureza de sus productos. Esto es aplicable tanto para los productos convencionales como para los ecológicos. Una marca con buena fama por aquí es Mount Natural, pues renuncia completamente a las materias primas venidas de China y cada lote es analizado en laboratorios alemanes para comprobar tanto su contenido en sustancias nocivas (metales pesados, pesticidas, fungicidas…) como en restos de moho. Precisamente es en especias de difícil elaboración y almacenamiento donde con frecuencia se utilizan productos químicos y de control de plagas que no deberían ingerirse a diario. La fórmula de las cápsulas de cúrcuma Premium de Mount Natural es la idónea para su salud.
Conclusión:
Se puede considerar que, en general, una cucharada de té al día (3 gramos aprox.) de cúrcuma en polvo no implica riesgos. Para tratar síntomas a corto plazo se puede incrementar la dosis a más de 10 gramos a día, también sin riesgos, o utilizar la curcumina de extracto de cúrcuma de alta concentración. Cuando las dosis son muy elevadas, es necesario consultar siempre con un médico. El consumo de la raíz amarilla es recomendable incluso de forma preventiva. Solo en casos muy raros, la administración del producto ha provocado molestias en los pacientes. A las mujeres embarazadas, lactantes y los niños menores de doce años se les desaconseja directamente, puesto que no existen estudios concretos sobre este grupo.
Más información sobre la cúrcuma…
También el magnesio tiene muchísimos beneficios para la salud.
Libro sobre cúrcuma GRATIS.
¡Consiga un libro compacto sobre cúrcuma gratuito! Suscríbase a nuestro boletín:
Dirección de correo electrónico
Su correo electrónico
Sí, deseo suscribirme al boletín sobre cúrcuma. Puedo cancelarlo siempre que quiera.